Se trata de una técnica que aplica ácido Hialurónico por presión sin agujas, sin pinchazos ni dolor. Es aplicado en la capa superior de la dermis: la dermis papilar. La duración va desde 6 meses a un año.
El ácido Hialurónico es un componente natural que genera nuestro cuerpo y que, entre otras funciones, ayuda a nuestra piel a estar hidratada y elástica. Cuando su producción es constante y regular, aproximadamente hasta mediados de la veintena, no hay apenas signos de envejecimiento. Pero, a partir de entonces, la producción va disminuyendo y la piel empieza a perder firmeza. Es a partir de ese momento cuando aparecen las primeras arrugas y la temida flacidez. ¿La solución? Aportar una dosis desde fuera.
Zonas de apicación
Labios, zonas peribucales, zonas perioculares y frente.